
La trágica historia y la misteriosa muerte de George Reeves, el actor al que no le gustaba ser Superman
Debutó como el "Hombre de acero" en la gran pantalla en 1951 y siguió interpretando al personaje en una serie de TV hasta 1958. Y aunque se volvió una estrella, no disfrutaba el papel. Murió en extrañas circunstancias en 1959, aunque sus conocidos coincidieron en que estaba frustrado por haber sido encasillado en el papel.

Superman había muerto. La noticia sorprendió a los lectores la mañana del miércoles 17 de junio de 1959, en la página 40 del New York Times. En rigor, el que dejaba de existir, a los 45 años, era George Reeves, quien se había vuelto popular gracias al “hombre de acero”.
Reeves, era el segundo actor en vestir la capa del hijo de Krypton, tras Kirk Alyn. Oriundo de Woolstock, Iowa, se había mudado a California en 1929 para estudiar actuación y volverse una estrella de la pantalla. Logró aparecer en algunos papeles menores en cintas como Lo que el viento se llevó (como uno de los pretendientes de Scarlett O’Hara) y De aquí a la eternidad.

Pero fue su interpretación de Superman la que le dio un nombre. Fue el primero en protagonizar un largometraje del superhéroe, Superman y el Hombre Topo, estrenada en 1951. El éxito fue tal, que luego se extendió como una serie televisiva, Las aventuras de Superman, que empezó a emitirse ese mismo año.
Y aunque en principio, a Reeves le agradaba la fama que había logrado con el papel, pronto se vio encasillado. “La serie le brindó al Sr. Reeves seguridad financiera (le pagaban por cada programa de televisión) y la devoción de una vasta audiencia de niños. Pero sus amigos dijeron que esto no le había dado ninguna satisfacción como actor”, detallaba la nota del NYT.
La serie tenía a Phyllis Coates como Lois Lane. El programa se emitió inicialmente en blanco y negro, pero después de dos temporadas, el clásico traje de Superman, en colores azul, rojo y amarillo, se pudo apreciar en todo su esplendor.
Después de la segunda temporada, tras combatir villanos y volar por Metrópolis, Reeves se sintió insatisfecho. Ya cerca de los cuarenta años, deseaba ampliar sus perspectivas como intérprete. Además, consideraba que su salario, como la estrella de la serie, era muy bajo.

En una charla con el Akron Beacon Journal, Reeves no se guardó nada. “El único inconveniente de interpretar a Superman es que me cuesta encontrar otros papeles. La mayoría de los productores de cine creen que estoy demasiado identificado con Superman, así que no me contratan".
Una idea que ratificó tiempo después el actor Ben Welden, uno de los amigos de Reeves en la industria. Así lo dice en Superman: Serial to Cereal. “Después de la serie Yo amo a Lucy, Superman dejó de ser un desafío para él... Sé que disfrutaba del papel, pero solía decir: ‘Aquí estoy, desperdiciando mi vida’“.
La kriptonita de George Reeves
La serie se emitió hasta 1958. Luego, Reeves intentó obtener papeles más serios, pero las negativas eran constantes y las ofertas se hacían cada vez más esporádicas. Por ello, estaba desanimado.
Así llegó ese trágico junio de 1959. Fue una noche en que Reeves y su prometida compartían con un amigo. “El sargento de policía V. A. Peterson dijo que el Sr. Reeves y dos invitados de la casa, la señorita Lenore Lemmon, de 35 años, su prometida, y Robert Condon, un escritor, se habían retirado a sus respectivas habitaciones anoche tarde”, apuntó el New York Times.

De ahí viene un incidente confuso. Según el NYT, ya de madrugada pasaron unos amigos a visitarlo. Ahí se produjo una discusión. “Dos amigos, William Bliss y la Sra. Carol Van Ronkel, vinieron y los despertaron. El Sr. Reeves discutió con el Sr. Bliss por lo tarde de la hora, luego se disculpó y dijo: ‘Estoy cansado; me voy a la cama’”.
Minutos después, Lemmon corrió a avisar que el actor yacía muerto en su cama. Se dijo entonces que la causa fue una herida de bala que se autoinfligió. La duda flotó, pero los cercanos coincidieron en una sola idea; “Sus amigos dijeron que el Sr. Reeves, de 45 años, había estado deprimido porque no podía encontrar otros trabajos como actor”. La pena y la frustración fueron la kriptonita de aquel Superman.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
3.
4.