
Goleada brutal: Bayern Múnich aplasta al débil Auckland City en el Mundial de Clubes y le mete miedo al Boca de Palacios
Los bávaros no tuvieron piedad con el humilde equipo neozelandés y les propinaron un abultado 10-0, en el estreno del Grupo C. En la próxima jornada, se medirán ante el conjunto xeneize.

El Bayern Múnich refrendó su cartel de candidato en el debut del Mundial de Clubes. El actual campeón de la Bundesliga no tuvo ningún tipo de piedad con el modesto Auckland City, de Nueva Zelanda, y lo aplastó por 10-0.
Este compromiso dio el vamos al Grupo C del certamen planetario. El otro partido lo animarán el Benfica de Portugal y el Boca Juniors de los chilenos Carlos Palacios y Williams Alarcón. Una vez superado el duelo con los lusos, los xeneizes se medirán con la máquina de Baviera.
Una goleada histórica
Como era de esperarse -por la diferencia de calidad evidente que existe entre ambos planteles (el club neozalandés es semiprofesional)-, el Bayern no dudó en tomar el control total de las acciones desde los primeros minutos. El cuadro bávaro asumió el protagonismo y fue en la búsqueda del primer gol desde el pitazo inicial en el TQL Stadium, de Cinccinati.
Los oceánicos, al verse sobrepasados, rápidamente se refugiaron en el fondo, intentando aguantar como sea el cero. Sin embargo, aquella timidez terminaría siendo una invitación para que los alemanes rompieran líneas y se adentraran sin oposición en territorio rival.
Justamente, a partir de esa iniciativa ofensiva, el elenco adiestrado por Vincent Kompany encontró la red a los 6′. Allí se juntó uno que se incorporó en este mercado de pases con otro que lleva varios años en la institución. Jonathan Tah, defensor que dejó el Bayer Leverkusen para convertirse en refuerzo en la zaga para la campaña 25/26, asistió de cabeza a Kingsley Coman. El francés no dejó escapar el buen pivoteo de su nuevo compañero y golpeó el balón con un testazo para marcar el tempranero 1-0.
Pasado el primer cuarto de hora, el recital germano continuó. En esta oportunidad, Coman cambió los papeles y pasó a ser el facilitador. El galo habilitó a su compatriota Sacha Boey, y el lateral fusiló con un derechazo al 18′.
Pero aquello solo sería el punto de partida para una ráfaga de anotaciones. Apenas dos minutos después, Michael Olisé empujó el esférico sobre la línea tras una patriada de Thomas Müller. Luego, al 21′, Coman se introdujo en el área del Auckland y estableció el segundo en su cuenta personal y el 4-0 transitorio. Era un sometimiento sin miramientos, en todos los aspectos.
Lejos de sacar el pie del acelerador, el Bayern siguió con la paliza en el primer tiempo. Llegando al 45′, Müller capturó un envío preciso de Olisé por la derecha y marcó el suyo. Un tanto especial si se tiene en cuenta que esta será la última competición en la que vestirá los colores del elenco seis veces campeón de Europa.

Posteriormente, el mencionado Olisé se vistió de Arjen Robben en los minutos de adición. El ex Crystal Palace se perfiló para la zurda (al igual que el mítico delantero neerlandés), y sacó un remate con la comba necesaria para ajustarse en el poste más lejano del arquero Conor Tracey. 6-0 casi sin despeinarse.
Llegan encendidos
El complemento le sirvió a Kompany para probar variantes. El belga metió de entrada cuatro cambios, entre ellos, a Jamal Musiala, que venía retornando de un desgarro. Harry Kane tuvo que salir, con una cuota de desazón, por no haber podido inscribir su nombre en el abultado marcador.
En esa línea, el joven valor alemán no tardó en volver a su mejor versión. Y por partida triple. En primer lugar, cuando el reloj marcaba los 67′, el extremo coronó una notable triangulación con Sergy Gnabry y Müller, clavando un fuerte disparo desde fuera del área. Cinco minutos más tarde, repitió los abrazos de gol con un lanzamiento desde el punto penal. Por último, al 84′, aprovechó una desinteligencia en el fondo e instauró su hat-trick.
Finalmente, la guinda de la torta fue obra, nuevamente, de Müller. El emblema de la institución definió con arco vacío, tras habilitación de Gnabry. Esta asociación ya tiene varios años de buena sintonía.
Con estos 10 goles, que se convierten en el resultado más abultado en la historia del Mundial de Clubes, la escuadra de Baviera mete miedo a Boca Juniors, que será su próximo rival, en el Hard Rock Stadium de Miami. El equipo de Carlos Palacios y Williams Alarcón tendrá su estreno este lunes, a las 18:00 horas, y después deberá ingeniárselas para frenar a un Bayern que llega totalmente encendido.
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