Durante la jornada del sábado se informó del fallecimiento de Al-Waleed bin Khaled bin Talal (36), conocido como el “Príncipe durmiente” de Arabia Saudita, tras mantenerse en coma durante los últimos 20 años.

Su muerte fue confirmada por su padre, Khalid Bin Talal bin Abdulaziz, en un comentario publicado en su cuenta de X.

“Con corazones que creen en la voluntad y el destino de Dios, y con gran tristeza y dolor, lloramos a nuestro querido hijo, príncipe Al-Waleed bin Khaled bin Talal bin Abdulaziz Al Saud, que Dios tenga piedad de él, quien falleció hoy”, escribió.

Quien fuera conocido durante gran parte de su vida como el “Príncipe durmiente”, era parte de una las familias más conocidas de la realeza saudí. Era el bisnieto de Abdulaziz Al Saud, quien fue el primer rey de Arabia Saudita hasta su muerte en 1932.

La condición de Al Waleed se originó el año 2005, cuando un grave accidente automovilístico mientras se encontraba realizando estudio militares en Londres le provocó lesiones cerebrales graves y hemorragias internas.

Tras ello, en la urgencia británica fue diagnosticado el estado vegetativo. La familia real decidió repatriarlo a Arabia Saudita y tratarlo en la Ciudad Médica Rey Abdulaziz de Riad, en la capital, donde se mantuvo durante el resto de su vida.

A pesar de las discusiones médicas sobre si mantenerlo o no conectado al soporte vital, considerando los pocos avances neurológicos mostrados por Al-Waleed, su padre, el príncipe Khaled bin Talal, rechazó constantemente que lo desconectaran.