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Trump ridiculiza a Biden y Obama: las mordaces descripciones a sus predecesores en el “Paseo de la fama presidencial” de la Casa Blanca

El mandatario estadounidense agregó nuevas características a su galería de retratos de exlíderes de Estados Unidos ubicada en el ala oeste de la Casa Blanca, usando un lenguaje más cercano al que utiliza en sus redes sociales.

Dos retratos del actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rodean una fotografía de un "autopen" con la firma de su último predecesor, Joe Biden, en el nuevo Paseo de la Fama presidencial de la Casa Blanca. Foto: Europa Press LA CASA BLANCA EN X

El Presidente Donald Trump se encuentra en medio de otra polémica al agregar nuevas características a su galería de retratos de exlíderes de Estados Unidos en el llamado “Paseo de la fama presidencial” ubicado en el ala oeste de la Casa Blanca, usando un lenguaje más cercano al que utiliza en sus redes sociales. Así, describió a Joe Biden como “dormido”, a Barack Obama como “divisivo” y a Ronald Reagan como un fanático de un joven Trump.

“Las placas son descripciones elocuentes de cada presidente y el legado que dejaron”, declaró la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en un comunicado sobre la instalación en la columnata que va desde el Ala Oeste hasta la residencia. “Como estudioso de la historia, muchas fueron escritas directamente por el propio presidente”, señaló.

Donald Trump, Melania Trump, Joe Biden y Jill Biden participan en la ceremonia de despedida de los Biden en el Frente Este del Capitolio, en Washington, el 20 de enero de 2025. Foto: Archivo Chris Kleponis

“Las incorporaciones, vistas públicamente por primera vez el miércoles, marcan el último esfuerzo de Trump por rehacer la Casa Blanca a su propia imagen, mientras burla los protocolos de cómo los presidentes tratan a sus predecesores y redobla su determinación de remodelar la forma en que se cuenta la historia de Estados Unidos”, indicó la agencia The Associated Press

Es más, el medio indicó que los toques trumpianos incluyen el lenguaje grandilocuente y el uso de mayúsculas descuidados del presidente. También resaltan las tensas relaciones de Trump con sus predecesores más recientes.

Una placa introductoria informa a los transeúntes que la exposición fue “concebida, construida y dedicada por el presidente Donald J. Trump como un homenaje a los presidentes pasados, buenos, malos y en algún punto intermedio”.

El expresidente estadounidense Bill Clinton hace un gesto durante el tercer día de la Convención Nacional Demócrata (DNC) en el United Center, en Chicago, Illinois, el 21 de agosto de 2024. Foto: Archivo Brendan McDermid

El demócrata Joe Biden sigue siendo el único expresidente en la exposición que no es reconocido con un retrato dorado. En lugar de la foto de Biden, la imagen de un “bolígrafo automático”, una máquina utilizada por los jefes de Estado para facilitar las firmas en documentos gubernamentales, cuelga en la pared de la Casa Blanca.

Biden, quien derrotó a Trump en las elecciones de 2020 y se retiró de las elecciones de 2024 antes de su revancha pendiente, es presentado como el “somnoliento Joe” y “por lejos, el peor presidente en la historia de Estados Unidos” que “llevó a nuestra nación al borde de la destrucción”.

Dos placas critican duramente a Biden por la inflación y su política energética e migratoria, entre otras cosas. El texto también culpa a Biden de la invasión de Ucrania por parte del presidente ruso, Vladimir Putin, y afirma falsamente que Biden fue elegido fraudulentamente.

La oficina de Biden después de su salida de la Casa Blanca no hizo comentarios sobre su placa.

Barack Obama es descrito como “un organizador comunitario, senador por Illinois durante un período y una de las figuras políticas más divisorias en la historia de Estados Unidos”.

La placa llama al logro interno más representativo de Obama como “la altamente ineficaz ‘Ley de Atención Médica Inasequible’”.

Y señala que Trump anuló otros logros importantes de Obama: “el terrible acuerdo nuclear con Irán... y los unilaterales acuerdos climáticos de París”.

George W. Bush, quien notablemente no habló con Trump la última vez que estuvieron juntos en el funeral del expresidente Jimmy Carter, parece obtener aprobación ya que se cita su creación del Departamento de Seguridad Nacional y que lideró a la nación después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001.

Pero la placa denuncia que Bush “inició guerras en Afganistán e Irak, ambas cosas que no deberían haber ocurrido”.

Un asistente de Bush no respondió a un mensaje solicitando comentarios.

Bill Clinton, otrora amigo de Trump, recibe escasos elogios por la legislación sobre delitos importantes, una reforma de la red de seguridad social y presupuestos equilibrados.

Pero su placa señala que Clinton consiguió esos logros con un Congreso republicano, con la ayuda del “boom tecnológico” de los años 1990 y “a pesar de los escándalos que plagaron su presidencia”.

El reconocimiento de Clinton describe el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), otro de sus principales logros, como “malo para Estados Unidos” y algo que Trump “derogaría” durante su primera presidencia. (Trump, de hecho, renegoció algunos términos con México y Canadá, pero no desechó el acuerdo fundamental).

Su placa termina con la frase: “En 2016, la esposa del presidente Clinton, Hillary, perdió la presidencia ante el presidente Donald J. Trump”.

El propio Trump tiene hasta dos retratos dedicados a sí mismo en la galería, uno por cada uno de sus mandatos. En los paneles bajo sus propios retratos, pero también bajo los de algunos de sus predecesores, no escatimó en elogios al describir sus logros. Por ejemplo, bajo el retrato de Ronald Reagan, se puede leer que el expresidente “era un gran admirador de Donald Trump antes de convertirse en presidente”.

El indulto que Gerald Ford concedió a Richard Nixon tras el escándalo de Watergate es calificado de “valiente” y una placa dedicada a Jimmy Carter ofrece un sombrío balance de su presidencia, pero al mismo tiempo señala que “¡hizo grandes cosas por la humanidad!” después de dejar el cargo.

El republicano George H. W. Bush, fallecido durante el primer mandato de Trump, es reconocido por su extenso currículum antes de convertirse en presidente, junto con leyes como la Ley de Aire Limpio y la Ley para Estadounidenses con Discapacidades (ADA), a pesar de que la administración Trump relajó su aplicación. La placa de Bush padre no menciona que él, y no Clinton, fue quien impulsó la importante ley comercial que dio origen al TLCAN.

La placa de Lyndon Johnson reconoce al demócrata texano por asegurar la Ley de Derechos Civiles de 1964 y la Ley de Derecho al Voto de 1965 (leyes fundamentales que la administración de Trump interpreta de forma diferente a las administraciones anteriores). Señala correctamente que el descontento con la guerra de Vietnam impulsó a Lyndon Johnson a no buscar la reelección en 1968.

Al demócrata John F. Kennedy, tío del secretario de Salud de Trump, Robert F. Kennedy Jr., se le atribuye el mérito de ser un “héroe de guerra” de la Segunda Guerra Mundial, que luego utilizó una “retórica conmovedora” como presidente en oposición al comunismo.

La placa del republicano Richard Nixon dice claramente que el escándalo Watergate condujo a su renuncia.

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