
Decretan prisión preventiva para los dos detenidos por la muerte de Francisco Albornoz
El 8° Juzgado de Garantía de Santiago los imputó a ambos como los autores de su muerte y fueron formalizados de momento por el delito de homicidio simple.

En prisión preventiva quedaron este sábado los dos sujetos detenidos por su participación en la muerte del técnico en farmacia Francisco Albornoz, quien falleció el pasado 23 de mayo y cuyo cuerpo fue encontrado el martes 3 de junio.
La audiencia comenzó alrededor de las 11 de la mañana y se extendió hasta pasadas las 18.00 horas.
Luego de que Fiscalía presentara antecedentes por casi dos horas y cuarenta y cinco minutos, las defensas de ambos imputados argumentaron sobre la participación de sus defendidos, tras lo cual pidieron las cautelares de arresto domiciliario total.
Sin embargo, el tribunal desestimó la solicitud y aceptó los argumentos de fiscalía para decretar la prisión preventiva, al considerarlos a ambos un peligro para la seguridad de la sociedad. La investigación se extenderá por 90 días.
El 8° Juzgado de Garantía de Santiago les imputó a ambos como los autores de la muerte de Albornoz. Aunque la Fiscalía solicitó que ambos fueron formalizados por el delito de homicidio calificado, por el momento la calificación jurídica por parte del tribunal sería de homicidio simple.
¿Homicidio simple o calificado?
Tras finalizar la formalización, la fiscal Rossan Folli detalló que la muerte de Francisco se habría producido al interior del departamento en que habría compartido con los dos imputados y no cuando fue lanzado al río Tinguiririca.
“La muerte de Francisco se produce en la madrugada del día 24 de mayo del presente año al interior del departamento ubicado en la Comuna de Ñuñoa (...) De los antecedentes también que se expusieron en la audiencia, se deja manifiesto que Francisco recibió golpes en su zona de la cabeza, los que lamentablemente derivaron en su fallecimiento”, explicó al respecto.
Además, explicó que para el Ministerio Público se encontraría descartada la teoría de una muerte por intoxicación tras los peritajes del Servicio Médico Legal (SML), que determinaron una lesión de tipo homicida. Sin embargo, también agregó que todavía no se ha establecido si hubo consumo de drogas al todavía no estar el examen toxicológico por parte del SML.
Mientras tanto, el abogado defensor del chef chileno explicó que se estarían barajando cuatro hipótesis en el caso.
“Esta causa recién está en investigación, se tiene que barajar y, en definitiva, decidir cuál de las cuatro es la que realmente pasó. De momento, el tribunal entendió que de momento se puede tener establecido una muerte dolosa”, explicó.
A lo que agregó: “Sin embargo, por parte de la defensa manejamos otras tres posibles hipótesis de lo que realmente pasó, que no son incompatibles entre ellas y en realidad, para poder acreditarlas estamos a la espera de que el Ministerio Público nos proporcione el informe toxicológico de la víctima”.
Los detalles del caso
Luego de estar desaparecido por cerca de 10 días, el cuerpo de Francisco Albornoz fue encontrado en un estero del río Tinguiririca en San Fernando, Región de O’Higgins.
Había sido visto por última vez el pasado 23 de mayo, día en que se habría reunido con los dos imputados por su muerte: un médico ecuatoriano y un chef chileno, de los cuáles el tribunal restringió seguir divulgando sus nombres y rostros.
El cuerpo de la víctima pudo ser encontrado gracias al relato entregado a la Fiscalía de Ñuñoa por el primer detenido, quien contó lo ocurrido aquella noche y también compartió antecedentes para detener al segundo involucrado en el caso.
El otro sujeto fue detenido el miércoles en su casa ubicada en Codegua, en la Región de O’Higgins. Allí habría sido encontrado intentado supuestamente deshacerse de evidencia en una estufa.
Inicialmente se había especulado con una muerte provocada por sobredosis de drogas en el contexto de una reunión de carácter sexual entre los tres, esto en base al relato entregado por el primer detenido.
Sin embargo, los peritajes realizados por el Servicio Médico Legal (SML) descartaron la sobredosis como causa de muerte y determinaron que el joven técnico en farmacia habría sido arrojado vivo al río y que falleció por un traumatismo encéfalo craneano.
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