Durante la mañana de este miércoles, Carabineros fue alertado respecto de un hombre que habría estado disparando desde el balcón de un edificio residencial de San Miguel presuntamente hasta el Hospital Barros Luco.

Con esta información, la institución policial desplegó un operativo que incluyó equipos negociadores del Grupo de Operaciones Especiales (GOPE) y uniformados de otros departamentos especializados de Carabineros, como el OS9 y el Laboratorio de Criminalística (Labocar).

De acuerdo con lo informado por Carabineros, se pudo negociar con el individuo -un chileno de 49 años- mediante los drones institucionales. Y una vez que se emitió la orden de entrada y se verificó que el sujeto se encontraba lejos del balcón, los efectivos entraron a la habitación y lo detuvieron.

“Elegimos el mejor lugar y el mejor momento. Obviamente a través de los drones establecimos que el no estaba presente en el balcón, porque eventualmente eso podría permitir que el cayera al suelo o atentara contra su vida”, acotó el general de servicio en la zona metropolitana, Manuel Cifuentes.

Según informó el fiscal de flagrancia Juan Cheuquiante, si bien en un principio se manejaba la hipótesis de que los disparos estaban dirigidos hacia el hospital, hasta ahora se ha establecido que éstos fueron percutados hacia una cancha cercana al edificio. Hasta ahora se ha determinado que fueron dos disparos.

El fiscal aclaró que no se ha determinado el origen del arma ni sus características, ni si el detenido es residente del edificio. Por ahora, se indagan presuntos delitos asociados a la ley de control de armas.

El detenido, en tanto, será trasladado a un centro asistencial para constatar lesiones y “su situación procesal se va a determinar en la eventual audiencia de control de detención según los antecedentes que se recaben y el resultado de la investigación en las siguientes horas”, señaló el fiscal.