Tragedia en La Reina: la máscara y la pistola falsa que compró el imputado para ocultar el triple homicidio de la familia Cruz-Coke
Un cuñado de la víctima, identificado como Jorge Ugalde, será formalizado por homicidio calificado en contexto de violencia intrafamiliar. Esta es la trama que se esconde detrás de un crimen que estuvo motivado por una millonaria disputa por la herencia familiar y que dejó a un padre y sus dos hijos de 17 años muertos.
No habían transcurrido 48 horas de la muerte del camarógrafo Eduardo Cruz-Coke (62) cuando los investigadores pudieron establecer que las heridas que tenía en su cuerpo no eran atribuibles a una autoagresión.
El fallecimiento del profesional, quien trabajó en varios proyectos televisivos de espacios culturales, alcanzó a investigarse de forma preliminar como un parricidio. Durante las primeras horas se indagó la posibilidad de que Cruz-Coke se habría quitado la vida luego de dar muerte a sus dos hijos por motivos desconocidos.
Sin embargo, el mismo día de los hechos la PDI y la Fiscalía echaron a andar bajo cuerda otra línea investigativa. Tal como informó La Tercera, desde muy temprano los investigadores comenzaron a tirar del hilo que los llevaría directamente a otro sospechoso y a un drama familiar por la disputa de una herencia. Esto debido a que los detectives identificaron elementos que no cuadraban en el relato de algunos de los supuestos testigos.

La idea inicial de que Cruz-Coke había matado a sus propios hijos -dos mellizos de 17 años- golpeó a su núcleo familiar, que se apresuró a rechazar esa línea investigativa y a afirmar que el camarógrafo era incapaz de cometer una acto de esas características.
De hecho, lo que encontraron los detectives el 18 de octubre en el inmueble de La Reina donde ocurrió el crimen permitió plantear las primeras dudas de que el caso se tratara de un parricidio. El cuerpo de Cruz-Coke fue encontrado en el patio del terreno ubicado en La Cañada 6652, donde se ubican otras dos casas: una de la víctima y otra de los padres. Sus hijos fueron hallados en el dormitorio principal con signos de haber sido asfixiados.
A pesar de que los investigadores llevaban días con la sospecha de que Cruz-Coke no era el autor de los homicidios, el asunto recién se hizo público el lunes luego de que llegaran los informes de pericias biológicas.
Con esos resultados, cuentan fuentes del caso, se constató que las heridas de Cruz-Coke en el cuello no habían sido autoinfligidas, sino que habían sido realizadas por un tercero. Las mismas fuentes cuentan que tenía al menos seis puñaladas. Además los análisis de sangre confirmaron que las muestras eran de la víctima, el padre de los dos mellizos.
El caso vivió un vuelco que recién se hizo público el lunes. Con los informes policiales la Fiscalía Metropolitana Oriente concretó la solicitud de una orden de detención para un familiar de las víctimas. Se trata de Jorge Ugalde Parraguez, cuñado de Cruz-Coke y cónyuge de su hermana Trinidad Cruz-Coke.
Las pistas
Cuando tuvieron que analizar el sitio del suceso, los detectives encontraron varias muestras de sangre en el inmueble que luego mandaron a analizar. Entre ellas hubo una en una manilla. No fue la única. Otras se encontraron en parte de la casa del camarógrafo. Las conclusiones preliminares de los informes policiales revelaron que el ADN corresponde a Ugalde, el imputado que fue detenido el lunes.
Con estos datos los investigadores creen que Cruz-Coke habría prestado una dura resistencia al supuesto ataque de Ugalde, en lo que habría terminado como una riña. Esta fue una de las pistas clave para que los investigadores levantaran una imputación contra Ugalde, de profesión sicólogo, por el delito de homicidio calificado en contexto de violencia intrafamiliar.
Esas son algunas de las pistas que presentará la Fiscalía en la audiencia de formalización programada para este martes pasado el mediodía. Allí se espera que los fiscales Carolina Remy-Maillet y Francisco Lanas presenten otros elementos, como cámaras de seguridad del sector donde se aprecia al imputado caminando con su perro en dirección al canal San Carlos con una bolsa, en cuyo interior habría artículos utilizados en los hechos investigados.

Asimismo, de acuerdo a antecedentes de la investigación, el sujeto actuó con una máscara de mono de estilo Halloween que había comprado la mañana del 18 de octubre en un mall chino. Esa máscara también tenía restos de sangre y fue encontrada en la pieza del imputado.
Por esos días el imputado también compró una pistola falsa, que fue encontrada en el sitio del suceso. Para los investigadores, el detenido intentó simular un robo, el que fue rápidamente descartado por el fiscal Lanas el mismo día en que ocurrieron los hechos.
Otra pista que presentarán los fiscales será la llamada, realizada cerca de las 19.30, que Ugalde hizo el mismo 18 de octubre al 133 de Carabineros. El imputado, que está detenido desde ayer, fue quien dio aviso a la policía de la muerte de su cuñado y sus dos sobrinos minutos después de haber entrado a la casa. Quienes conocieron de esa llamada comentan que Ugalde no mostró mayores emociones al otro lado del teléfono y se limitó a decir: “Los mataron”.
Otro antecedente que maneja la Fiscalía es que a fines de 2024 Cruz-Coke habría sido víctima de lo que se consideró como un intento de envenenamiento que involucraría a su cuñado. El hecho no fue denunciado, pero sí fue conocido por cercanos y amigos de la víctima, además de la atención médica respectiva.
Respecto a las dos víctimas menores de edad, fuentes que han sabido del caso relatan que sus cuerpos no tenían lesiones, pero si se constató que fueron adormecidos con medicamentos inductores del sueño. Luego de eso fueron asfixiados. La causa preliminar de muerte fue de asfixia por sofocación.
Por último, al momento de la detención los policías encontraron varios frascos de marihuana en la habitación del sujeto. El imputado, además, se encontraba en una cama meditando, lo que a juicio de los investigadores es una señal de que sabía que la policía estaba detrás suyo.
El móvil
El martes, el fiscal Lanas dijo que había indicios preliminares sobre la motivación del crimen. Sin entregar detalles, dijo que esto tenía relación con “diferencias familiares”. En específico, lo que los fiscales investigan está relacionado a una herencia que dejó el padre de la víctima, Eduardo Cruz-Coke Madrid, quien falleció en 2017.
En 2014 Trinidad Cruz-Coke y Jorge Ugalde constituyeron una sociedad con los padres de Cruz-Coke. A esa sociedad el patriarca familiar traspasó sus bienes inmuebles, con lo que quedó con más del 80% de participación. Luego de la muerte de la madre, Herta Japke, en 2022, se habrían desencadenado las disputas familiares por el patrimonio que está avaluado en más de mil millones de pesos. Es allí donde los fiscales tienen puesta la lupa.
Los investigadores se encuentran despejando si hubo más partícipes en el crimen y todos los antecedentes revelan que el triple homicidio fue planificado, lo que sería informado en la audiencia de esta tarde. Hasta ahora han revelado que Trinidad Cruz-Coke tiene calidad de imputada y ya declaró en la causa. Se sospecha que ella pudo haber tenido un rol en la planificación del crimen, y si bien vive con Ugalde, desde antes de los hechos estaba fuera de Santiago. Para despejar su participación, la Fiscalía con la PDI están revisando computadores y celulares para establecer su conexión con los hechos.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
3.


















