Por Pedro RosasEl futuro republicano y el test a Kast para liderar un gobierno de derecha
En el partido fundado por José Antonio Kast están convencidos de que llegarán a La Moneda y ya preparan ese escenario. Aunar a las colectividades del sector y mantener ordenada a su bancada, que será la más grande del Congreso, son los principales desafíos que enfrentan.

“Ya todo está dicho”.
Visiblemente optimista, con esas palabras el abanderado del Partido Republicano, José Antonio Kast, se despidió ayer en la mañana de Temuco, donde el jueves sostuvo su cierre de campaña previo a la segunda vuelta presidencial de este domingo, en la que se enfrentará con la candidata del oficialismo y la DC, Jeannette Jara.
Ya en Santiago, el republicano mantendrá una agenda desocupada pensando en la elección. Y es que en el comando transmiten que las cartas están echadas y que se cumplirán los pronósticos de las encuestas de que sea Kast el ganador. Por lo mismo, más que mirar hacia el domingo, están preparando lo que será la instalación del gobierno y los equipos que lo acompañarán en el futuro gabinete.
Reflejo de eso ha sido que durante estos días ya han empezado con la mudanza a la denominada “Moneda chica”, que -según adelantó Ex-Ante- se ubicará en la comuna de Las Condes, en una casona en La Gloria 88.
Allí, se espera que el lunes estén instalados los equipos del abanderado y uno de los primeros pasos -según fuentes del comando- será la conformación de un comité político de partidos y cerrar un acuerdo programático con el resto de los partidos que respaldan a Kast: Chile Vamos (UDI, RN y Evópoli), Amarillos, Demócratas, libertarios y socialcristianos.
Ese primer trabajo -recalcan- será clave para formar el futuro gobierno y una eventual coalición de todo el sector. En esa discusión, el rol de Kast será determinante. Y es que en la derecha no esconden que cómo se ordenen para la eventual administración será el principal test al liderazgo del exdiputado.
Por ello, si bien hasta el momento han visto de buena forma las señales que ha entregado a lo largo de la campaña, como el reciente anuncio de renunciar a su militancia si llega a La Moneda, aun así reiteran que la unidad del sector es algo que será su responsabilidad mantener durante los próximos cuatro años y que cualquier tipo de maximalismo podría terminar enredando ese trabajo, pues se trata de partidos con proyectos radicalmente distintos. Esto, tanto en el gobierno como en el Congreso.
Y es que si todo sale de acuerdo a lo planificado, el próximo 11 de marzo el Partido Republicano no solo llegará a La Moneda, sino que también entrará a la sede legislativa con una bancada mucho más grande a la actual (31 diputados), posicionándose como la principal colectividad de la derecha.
Ese escenario, reconocen dirigentes del partido, viene con sus propios desafíos. Y es que si bien en 2021 Kast también alcanzó el balotaje, la tienda obtuvo un total de 14 escaños en la Cámara y solamente un senador, y se preparaba para ser oposición al gobierno de Gabriel Boric. En ese contexto, en el partido no esconden que la forma de enfrentar los próximos cuatro años será radicalmente distinta.
Hoy no solo se perfilan para ser oficialismo, sino para ser la bancada más grande del Congreso y los articuladores de toda la actual oposición. Así, tras la primera vuelta, en la colectividad empezaron a dar los primeros pasos para tantear terreno en la sede legislativa.

Y es que si bien la bancada republicana se ha caracterizado por ser una de las más disciplinadas, lo cierto es que con un mayor número de parlamentarios, varios republicanos reconocen que mantener el orden podría ponerse cuesta arriba. Lo anterior, sobre todo, considerando que serán ellos los que estarán en La Moneda, por lo que no quieren dejar nada al azar.
Sin ir más lejos, incluso en este periodo parlamentario no lograron evitar polémicas y algunas bajas sensibles. Entre ellos, las de los diputados Gonzalo de la Carrera, Johannes Kaiser, Cristóbal Urruticoechea, Gloria Naveillán y los senadores Rojo Edwards y Carmen Gloria Aravena. Estos últimos, al igual que Naveillán, dejaron el partido con duras críticas a figuras como Kast y su principal asesor, Cristián Valenzuela.
Esos episodios se quieren evitar a toda costa en el nuevo periodo. En ese contexto, el presidente del partido y senador electo por Valparaíso, Arturo Squella, ha asumido un rol clave y se perfila como el principal articulador en el Congreso.
Tras la primera vuelta, su rutina se ha concentrado entre Santiago y Valparaíso, no solo para empezar a coordinar el trabajo legislativo con la actual bancada, sino también para empezar a tender puentes no solo con el resto del sector, sino también con el actual oficialismo.
De hecho, según fuentes de republicanos, Squella ya ha sostenido conversaciones informales con algunos parlamentarios de la izquierda para empezar a sondear la posibilidad de algunos proyectos de ley que serán clave para el eventual gobierno de Kast en materia de inmigración, seguridad y también una reforma judicial.
A lo anterior, según comentan algunos diputados republicanos, se sumó una instrucción clara de empezar a coordinar el trabajo y las distintas bajadas comunicacionales con los futuros miembros de la bancada, para lo que si bien aún no ha habido un encuentro formal, sí se mantienen contactos diarios. Este miércoles, de hecho, varios de ellos asistieron a un almuerzo en el Congreso.
Junto a esas indicaciones, según un miembro del comando, también se les pidió a todos los parlamentarios evitar entrevistas con medios de comunicación, con el objetivo de no arriesgarse a abrir un flanco. Esto, sobre todo tras los dichos del diputado José Meza, quien hace unos días desató un flanco en la campaña presidencial al mostrarse a favor de indultar a reos de edad avanzada con enfermedades terminales, incluidos violadores de menores.
Por lo pronto, el foco también ha estado en las negociaciones por la presidencia de la Cámara, donde republicanos corre con ventaja al tener la bancada más grande. En ese contexto, ya están sonando los nombres de los diputados Agustín Romero y Juan Irarrázaval, aunque algunos se muestran abiertos a dejar ese espacio a otro partido del área para “mantener los equilibrios”.

De hecho, en sectores de la derecha advierten que “entregar” ese puesto podría ser una buena señal de los republicanos para poder cerrar apoyos a algunas de sus iniciativas. Sin ir más lejos, el exabanderado Franco Parisi, cuyo partido eligió a 14 diputados, advirtió ayer que ellos buscarán presidir la Cámara de Diputadas y Diputados.
“Creo que sería muy malo para Chile que esté el presidente del Partido Republicano en ejercicio en La Moneda y también acá (en la Cámara). A mí me gusta equiparar la balanza”, dijo.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
3.
4.
Plan digital + LT Beneficios por 3 meses
Infórmate para la segunda vuelta y usa tus beneficios 🗳️$3.990/mes SUSCRÍBETE
















