Red Activa

Nancy Silva: “Menores saldos de ahorro e inversión en mujeres puede reflejar limitaciones en el desarrollo del patrimonio y crecimiento económico personal”

Según la Directora General de Estudios de la CMF, Nancy Silva, las mujeres en Chile siguen enfrentando importantes brechas en montos de saldos de ahorro e inversión o de acceso a crédito, por lo que es clave avanzar en una mejor educación y alfabetización financiera, así como en una mayor participación de mujeres en puestos directivos.

Nancy Silva, Directora General de Estudios de la CMF

La edición número 24 del informe de la Comisión para el Mercado Financiero, publicado en julio de 2025, presenta un panorama amplio sobre las brechas de género en el acceso a cuentas bancarias, créditos, seguros, ahorro y cargos directivos en empresas del sector, así como la incorporación, por primera vez, de datos sobre participación femenina en inversión de fondos mutuos.

Uno de los principales hallazgos fue que el acceso a productos financieros entre hombres y mujeres ha tenido una tendencia similar. Sin embargo, los montos promedio de ahorro, inversión y crédito siguen siendo significativamente menores para las mujeres.

En entrevista con la Directora General de Estudios de la CMF, Nancy Silva, analizó la causa de esta brecha, y cómo el sistema financiero, así como otros espacios de educación temprana, pueden aportar en una mayor participación financiera y, por ende, mayor independencia económica para las mujeres.

Según el informe, las mujeres siguen accediendo a montos menores y asumiendo menos riesgos. ¿Qué significa esto para su bienestar financiero de largo plazo?

Aunque el acceso a productos financieros entre hombres y mujeres es casi igualitario, el informe revela que los montos de los saldos de ahorro e inversión o de acceso a crédito son significativamente menores en las mujeres. Esto puede indicar una menor exposición al riesgo, lo que es positivo para el bienestar financiero, pero también puede reflejar limitaciones en el desarrollo del patrimonio, inversión y crecimiento económico personal, lo que apunta a un menor bienestar.

¿Qué puede hacer la CMF para regularlo?

Para reducir la brecha, la CMF puede seguir fortaleciendo la transparencia de datos desagregados por género y colaborar con otras instituciones públicas y privadas en este esfuerzo; promover iniciativas de inclusión financiera con enfoque de género, en línea con su estrategia institucional; fomentar la educación financiera de la mujeres, a quienes se identifica como grupo prioritario en la política institucional; promover el desarrollo de productos financieros ajustados a las necesidades de los clientes (por ejemplo, créditos para emprendedoras); supervisar prácticas de otorgamiento de crédito, para evitar actuaciones discriminatorias (por ejemplo, en los algoritmos de evaluación crediticia); e impulsar la participación femenina en cargos directivos del sistema financiero.

Este año se incluyó por primera vez información de género sobre la inversión en fondos mutuos, donde se observa una mayor proporción de mujeres respecto de hombres en el perfil conservador. ¿Por qué se incorporó este factor y qué interpretación hace del hallazgo?

La CMF está haciendo un esfuerzo sistemático por levantar información para medir la inclusión financiera de la población, con una larga trayectoria en términos de información bancaria, e incorporando datos de participación en la industria de seguros (2023) y, este año, en la industria de fondos mutuos.

Los hallazgos son bien interesantes. En Chile existen más de 2 millones de inversionistas únicos, de los cuales la mitad corresponde a mujeres. El monto promedio invertido por hombres era de $18 millones, y el de las mujeres de $13 millones. Con los números agregados se podría pensar que la inversión en FFMM se concentra en personas con altos ingresos y mayoritariamente hombres, pero solo el 9% de los partícipes está en el segmento de ingresos superior a $3 millones mensuales. Más relevante aún, el 54% de los partícipes tiene ingresos inferiores a $1 millón y, en este segmento, la proporción de mujeres es superior a la de hombres y los montos medianos invertidos por mujeres también son significativamente mayores. Como estos son productos más sofisticados, el desafío es mejorar la educación financiera de las mujeres, para que puedan maximizar su retorno ajustado por riesgo.

Nancy Silva, Directora General de Estudios de la CMF

El informe muestra que las mujeres tienen mejor comportamiento de pago, menor morosidad y menor apalancamiento, pero también enfrentan más reestructuraciones de deuda por sus tramos de ingreso...

Según el informe, las mujeres muestran mejor comportamiento de pago, menor morosidad y menor apalancamiento que los hombres, y también enfrentan reestructuraciones y castigos de deuda significativamente menores que los de los hombres, tanto en deuda de consumo como de vivienda. La única excepción es en las renegociaciones de la deuda de consumo en los segmentos de ingresos menores a $500 mil, donde las mujeres superan a los hombres, probablemente asociado al mayor acceso a tarjetas de crédito no bancario.

¿Cuál es el desafío?

El desafío es, nuevamente, mejorar la educación financiera de la población y generar un adecuado diseño de productos para un segmento que es histórica y sistemáticamente más responsable en su comportamiento de pagos.

En los sectores del sistema financiero, como las inversiones con perfil de riesgo más agresivo, la participación femenina disminuye drásticamente, en comparación con el más conservador.

Una cuestión llamativa de los resultados del informe es que toda la población es muy conservadora en su perfil de inversión, pero las mujeres aún más.

¿Y esto puede reflejar una brecha de alfabetización financiera o de confianza, por ejemplo?

Efectivamente, esto puede reflejar una brecha de alfabetización financiera.

Según los resultados de la Encuesta de Capacidades Financieras CAF-CMF 2023, el conocimiento financiero de las mujeres es significativamente menor al de los hombres. Esta brecha podría explicar la mayor aversión al riesgo. Las estrategias de inclusión y educación financiera de la CMF incluyen a las mujeres entre sus poblaciones prioritarias.

En cuanto a los cargos directivos, viendo que la reducción de las brechas avanzan de manera lenta y que muchas mujeres aún no acceden a los mismos beneficios financieros que los hombres, ¿cómo la CMF puede promover una mayor equidad de género en los próximos años?

La NCG 519 incorpora la obligación de informar políticas de diversidad en la confirmación de los directorios e instancias que apoyen el proceso de elección de directores de ambos sexos por parte de los accionistas, en particular, de reglas como cuotas de representación máxima por sexo. Con esto, la CMF contribuye desde la divulgación de información pública al mercado, para que los inversionistas que valoran una mayor diversidad tomen decisiones apropiadas.

Un problema adicional es la baja participación de mujeres en cargos gerenciales. Es importante avanzar en esta línea, para que la participación en directorios sea resultado de un desarrollo de carrera natural de las mujeres profesionales.

Además, el informe muestra que la cobertura de seguros de vida sigue siendo levemente menor que la de los hombres.

Efectivamente, la cobertura poblacional de seguros es menor para mujeres que para hombres, especialmente en los seguros generales.

¿A qué se debe?

Esto puede responder a cuestiones estructurales, como los menores ingresos, las mayores brechas salariales, la mayor esperanza de vida y el menor conocimiento financiero promedio de las mujeres. La falta de comprensión del uso de estos productos puede explicar que no se aprecien los beneficios de su contratación. Una prueba de esto es que solo los seguros obligatorios (SOAP, desgravamen, cesantía) tienen alta cobertura poblacional.

Finalmente, el documento demuestra que las mujeres tienen menor conocimiento financiero pero mayor disposición a planificar. ¿Cómo se puede potenciar esa actitud por parte del sistema educativo?

La medición de capacidades financieras incluye conocimiento, comportamiento y actitud. Las mujeres están peor en conocimiento, no hay diferencias estadísticas significativas en comportamiento (planificación financiera), y tienen una mejor actitud financiera (privilegiar el largo plazo por sobre el corto plazo).

El sistema educativo puede aportar capacitando a los profesores y a otros educadores financieros, para distintas comunidades. Destaco aquí la colaboración entre el Mineduc y la CMF en la creación del material “Yo y mis finanzas - Mi dinero en juego” para estudiantes y docentes. Además, en 2024 la CMF publicó un informe de evaluación de iniciativas de educación financiera privadas, en el cual las iniciativas mejor evaluadas tienen en común que sus contenidos son fáciles de comprender; con foco en gestión financiera personal, riesgos y toma de decisiones informadas; y actividades que no incluyan prácticas de marketing o comercialización de productos.

Entre las actividades mejor valoradas, se identifican las que combinan educación financiera práctica con formatos accesibles e innovadores, como herramientas interactivas, juegos online, talleres y charlas.

Nancy Silva, Directora General de Estudios de la CMF
Más sobre:RedActivaInversiónSistema FinancieroAhorroMujeresCMF

COMENTARIOS

Para comentar este artículo debes ser suscriptor.

Contenidos exclusivos y descuentos especiales

Digital + LT Beneficios$1990/mes por 5 meses SUSCRÍBETE