Sandro Castro tiene 33 años. Y en lugar de llevar armas en las manos, toma su celular y se graba, mientras escucha Bad Bunny. Es el nieto de Fidel Castro, el hombre que gobernó Cuba por casi cinco décadas.

Pero son muy distintos. No usa traje militar color verde olivo, sino poleras del Real Madrid o conjuntos deportivos. Tiene 117.000 seguidores en Instagram, y algunos lo califican como “vago de la élite”. Así se lee en un reciente perfil que escribió sobre él, el diario español El País.

Sandro se convirtió en una figura controversial en su país, y es el miembro de la familia Castro de quien más se habla.

Esta es la historia del nieto del hombre que encabezó la Revolución Cubana.

Quién es Sandro, el nieto influencer de Fidel Castro

Sandro Castro tiene 33 años. Es hijo de uno de los cinco hijos que Fidel Castro tuvo con Dalia Soto del Valle, Alexis Castro Soto del Valle.

Pero la información sobre la familia Castro es poca. Esto, porque el cubano se encargó de hermetizar toda la información para “protegerlos”, mantener en secreto sus privilegios, pero también para darle “legitimidad al régimen”, aseguró el profesor de Historia de Cuba, Sergio López Rivero, en conversación con El País.

El nieto de Castro nació cuando el mandatario tenía 66 años. Aparentemente, desde entonces vive en la zona de Playa en La Habana, junto al resto de la familia que todavía goza de un condominio con varias propiedades, en un sector exclusivo.

En los videos y fotografías que sube a sus redes sociales, a Sandro se lo ve con ropa de marca. Viste zapatillas Air Force 1 y pantalones cortos de Nike, poleras de equipos de fútbol, usa un iPhone de Apple y toma cerveza Cristal.

También tiene una cuenta de TikTok donde sube videos bailando con autos de lujo, tomando café en lugares paradisíacos y tomando alcohol con amigos. Una postura muy diferente a la de su abuelo, que trataba de ocultar su vida personal del resto del país.

Esto explica por qué a Sandro lo siguen tantas personas en las redes: es lo más cercano que el pueblo cubano tiene para mirar cómo vive la familia de Fidel Castro. Una realidad distinta a los apagones y escasez que viven los cubanos, fuera del complejo de propiedades lujosas en la costa.

Las reacciones que provoca Sandro Castro en Cuba

Sandro no pasa desapercibido, y genera molestia en todos los sectores. Y es que, si bien presume sus bienes por las redes sociales, también aprovechó las plataformas para criticar la situación en la que se encuentra el país.

Por ejemplo, en ciertos videos, criticó el aumento de las tarifas de Internet, los apagones y la falta de alimentos, como el pollo. También, en un video, le pide al presidente de Estados Unidos, Donald Trump que no vea a los emigrantes como enemigos.

“No todos son delincuentes, se ganan su dinero honradamente, ayudan a fortalecer la economía de tu país. Dale oportunidad y vida al emigrante, porque al final patria es humanidad”, dice, mientras sostiene una bandera de Cuba y otra de México, y tiene escrito en su abdomen descubierto la frase “fuerza América Latina”.

Pero al mismo tiempo, el nieto de Fidel Castro genera rechazo en el pueblo. La cubana Anay González Figueredo, que habló con el mismo medio, opinó que “mientras el ciudadano común sortea apagones, escasez de insumos médicos y censura, este vástago de la élite se posiciona como influencer postrevolucionario”.

“Sandro no siente cariño por su abuelo, ni respeta su memoria”, dijo por su parte Ernesto Limia, intelectual oficialista consultado por El País.